Cuando hablamos del tarot de Marseille (en nuestro idioma, tarot de Marsella) no estamos refiriendo al que probablemente sea el padre de todos los demás. Es decir que tanto el tarot de los ángeles, como el tarot amor, el gitano, o cualquier otro relacionado se basó en este para poder ser creado.
Esto se cree así ya que todos los tarots tienen elementos que se pueden ver en este tipo. Por esta razón los expertos piensan que se considera el origen de todo. Un tarot muy especial con una fuerza y un poder que nunca habríamos creído posible.
Posible origen del tarot de Marseille
Desde luego, el “tarot de Marseille” se considera el más popular que nos podemos encontrar. Es muy fácil de interpretar ya que, a diferencia de otros tipos de tarot, este posee dibujos claros que ayudarán a poder ofrecer una interpretación muy clara y libre de errores.
No se sabe muy bien el año o la época de su creación; algunos expertos piensan que data directamente del Antiguo Egipto. La razón de esto es que se han encontrado algunos jeroglíficos con ilustraciones propias que también están contenidas en la baraja del tarot… eso si, no se sabe con certeza si en aquel entonces ya se habían inventado las cartas que tuvieran recreadas estos símbolos, o bien solamente eran dibujos con significado que más adelante se trasladarían a los naipes.
Poco a poco empezó a extenderse a lo largo de algunos países de Europa como Suiza, Italia, Alemania… sería a partir de ese momento cuando se originaría los diferentes tipos de tarot teniendo en este su base principal.
Lo que si que se sabe es que el nombre de tarot de Marseille sería acuñado por Paul Marteau ya en los años 30. Este hombre era, lógicamente, de origen Francés y lo bautizaría con este nombre a partir de algunos diseños que se habían realizado en la ciudad de Marsella (aquí es donde se empezaron a fabricar estos naipes tan especiales).
La baraja tal y como la encontramos hoy en día, en realidad tiene su origen en toda una serie de diseños que se produjeron en el pasado utilizando la técnica de xilografía. Ha sido a partir del siglo XIX cuando se han ido lanzado todos estos dibujos hasta que hemos llegado a nuestra época.
Un origen muy especial para un tarot que también lo es.